La presoterapia está indicada para mejorar la circulación, cuando existen problemas en postoperatorios, como complemento de tratamientos contra la obesidad, la celulitis, varices; y ante problemas de retención de líquidos, consiguiéndo un perfecto drenaje linfático, a través del que se eliminan toxinas y grasas acumuladas.
Además alivia, significativamente, muchos problemas de salud como el reumatismo, las migrañas o la retención de líquidos y es un gran aliado en los tratamientos pre y post-liposucción, anti-estrés, piernas cansadas, e hinchazón localizada.
Durante los embarazos se usa para mejorar el aspecto de la piel y evitar la sensación de pesadez en las piernas y en los postpartos ayuda a la paciente a recuperar la figura; utilizándose también en el tratamiento de las alteraciones orgánicas que causa la menopausia, como la acumulación de líquidos, osteoporosis, celulitis, dolores musculares, sobrepeso etc.
Se trata de una técnica poco invasiva, sin riesgos, que puede aplicarse en todas las edades y que proporciona además una agradable sensación de relajación y bienestar.
La presoterapia es útil tanto a mujeres como a hombres, en función del tratamiento que se requiera.
La presoterapia está indicada para: